Todos deberíamos tener atención médica de calidad en cada comunidad o pueblo de nuestro país, sin excepciones, porque es nuestro derecho y porque es posible. Si todos tuviéramos servicios de salud nuestra sociedad sería más igual, las penas serían menos.

Cuántos de nosotros hemos pasado largos tiempos de espera, instalaciones inadecuadas, pocas medicinas, pocos médicos, pocos recursos y muchos obstáculos que impiden recibir cuidados oportunos y apropiados, provocando enfermedades prevenibles e incluso la muerte.

Mejorar el acceso y la calidad de la atención médica en México es un acto de justicia social que traería beneficios económicos. Invertir en atención médica podría generar una fuerza laboral más saludable, mayor productividad y costos de atención médica más bajos a largo plazo.

Al priorizar una atención médica de calidad para todos, México caminaría hacia un futuro saludable y brillante. Tenemos que invertir lo que sea necesario en personal médico y medicinas, en infraestructura, alcanzar la cobertura mínima en cada rincón del país, la cobertura básica y a partir de ahí, empezar a crecer.

Creemos que los servicios de salud son esenciales para que cualquier sociedad tenga éxito.